Monseñor Miguel Cabrejos Vidarte O. F. M. arzobispo emérito y administrador apostólico de la Arquidiócesis Metropolitana de Trujillo, presidió la Santa Misa de Acción de Gracias en la Basílica Catedral por los 25 años y cinco meses de su servicio pastoral en esta Arquidiócesis. La Sagrada Eucaristía fue concelebrada por Mons. Francisco Castro; Obispo Auxiliar de Trujillo, los obispos de las Diócesis de Tarma, Chosica y Huacho, y de la Prelatura de Huamachuco, algunos sacerdotes de esta Iglesia particular.
En su homilía, monseñor Miguel Cabrejos agradeció a Dios por concederle el don del episcopado, a la Santísima Virgen María y al Pueblo fiel de Dios, a quien se dirigió con estas palabras: “poco de lo hecho se hubiera logrado si, como su pastor, no hubiera contado con la cercanía y la generosa colaboración de todos ustedes”.
Durante la Celebración Eucarística, el padre Guillermo Inca, secretario general adjunto de la Conferencia Episcopal Peruana (CEP), en nombre del presidente de la CEP, Mons. Carlos García Camader, agradeció a monseñor Miguel ya que sembró comunión, colegialidad, dinamismo y productividad pastoral en el Episcopado durante los cuatro periodos que trabajó como presidente en esa institución.
Luego, la Hna. Emilia Cruz agradeció al arzobispo emérito de Trujillo por su vida y su ejemplo de entrega infatigable. “El obispo es aquel que gobierna, enseña y santifica al pueblo. La Iglesia establece que la función de gobernar termine en un determinado momento, al cumplir 75 años de edad. Y esto es lo que ocurre hoy. El momento de gobernar, ha terminado. No el de enseñar y santificar”, explicó.
Luego de la Santa Misa, monseñor Miguel salió en procesión con el Santísimo Sacramento en el interior de la Basílica Catedral mientras los fieles cantaban, arrojaban pétalos y elevaban sus oraciones.
Trujillo, miércoles 19 de febrero de 2025
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